La industria embotelladora láctea requiere procesos de aire limpio para asegurar que sus productos lleguen al consumidor final en óptimo estado. La asepsia del ambiente determinará la calidad de las leches, yogures y demás. El procedimiento es aún más delicado en el caso de las leches fórmulas para bebés. 

Las plantas procesadoras de lácteos tienen que mantener sus espacios libres de fuentes contaminantes. Algunos de los agentes más comunes son: Escherichia Coli, Enterobacter sakazakii, elementos desinfectantes utilizados durante procesamiento y envasado, COV, ingredientes que pueden causar contaminación cruzada, ozono, nubes microbianas y bacterias en general. Para lograrlo, Casiba provee soluciones de filtrado acorde a las altas exigencias de esta industria. Además, los equipos operan sobre las temperaturas y los niveles de humedad en el ambiente para la conservación de los alimentos. Los sistemas purificación de aire aportarán condiciones para que los lácteos cumplan con todas las estrictas normas de calidad durante su producción.