Sidor es un complejo metalúrgico que se dedica a la producción de acero con tecnologías de reducción directa y hornos eléctricos.
Esta empresa tenía inconvenientes de ventilación y contaminación ambiental en la sala de compresores Sullair, con dos máquinas LS-160 de permanente salida de servicio por alta temperatura. Por esta razón debían producir con las puertas abiertas y, en consecuencia, se generaba una situación de contaminación ambiental. Además, se saturaban los filtros internos de forma muy prematura y se generaban roturas de máquinas.
Se aplicó una solución típica y de muy probada eficiencia para estos casos como la presurización de la sala con aire filtrado. La inyección fue de 30.000 m3/h y se utilizó como primera etapa de filtración un separador inercial autolimpiante CASIBA 2501 INE de 9 celdas dobles, con su respectivo ventilador de purga de 4 HP. Como etapa final se utilizaron filtros rígidos de alta eficiencia CASIBA 410 RF y en las salidas de aire caliente se pusieron rejas de escape con filtros metálicos CASIBA 111 AV.